CARIES
La caries es una enfermedad que se desarrolla por la presencia de determinados microorganismos en la superficie dental, que metabolizan los azúcares y los convierten en ácidos destruyendo la estructura del diente.
Cuando una caries esta presente y avanza hacia estructuras mas profundas del diente las bacterias se multiplican, en ambientes cada vez mas favorables para ellas. Por ese motivo, las caries crecen exponencialmente con el paso del tiempo pudiendo descomponer por completo la estructura dental conduciendo, en fases avanzadas, inevitablemente a su extracción. La superficie dental infectada por caries no es regenerable. Actualmente , la solución es extirpar el tejido infectado y sustituirlo por materiales de empaste, deteniendo su progresión. La detección precoz es fundamental.
Su prevención es un problema global, en estudios recientes a nivel nacional se ha comprobado que el 92% de la población adulta padece caries. Popularmente asociamos las caries al dolor, sin embargo, la caries se puede desarrollar sin síntomas asociados. Caries en estados de desarrollo avanzados pueden no producir ni dolor ni molestias.
Saber prevenir las caries puede ayudar a que los niños de hoy tengan una mejor salud dental mañana.
Para evitar la aparición de la caries dental es fundamental prestar atención a factores como la alimentación, una higiene bucodental adecuada y las visitas periódicas al dentista. Se cree que los azúcares simples (azúcar de mesa, caramelos, golosinas…) son más cariogénicos que la pasta, el arroz, el pan o las frutas. Sin embargo, en la actualidad, se sabe que cualquier alimento que contenga carbohidratos contribuye en la misma medida a las caries. Incluso el pan, en algunos casos, puede resultar más perjudicial que algunas golosinas.
CONSEJOS:
Visita todos los años a tu dentista para descartar la aparición de nuevas caries y desarrollar métodos de prevención.
Controla la frecuencia en la ingesta de alimentos cariogénicos sobretodo entre comidas, ya que tiene una fuerte relación con el riesgo de caries.
El cepillado debe ser realizado dentro de los primeros 20 minutos tras la ingesta de alimentos.
Existe la creencia de que algunos jarabes para niños destruyen los dientes. Es importante no olvidar el cepillado dental después de la ingesta de estos jarabes infantiles ya que suelen contener mucho azúcar con la finalidad de que tengan un sabor agradable.
Otros medicamentos, como los ansiolíticos, o determinadas intervenciones médicas, pueden fomentar la sequedad de boca favoreciendo así la aparición de caries.
Tu dentista puede desarrollar un estudio especifico de tu dieta con el fin de limitar la ingesta excesiva de azúcar y carbohidratos. En función de cuánto se pega a los dientes un alimento, este tiene más riesgo de causar caries, en comparación con los alimentos que desaparecen de la boca con rapidez. Todos los alimentos con ácido promueven la desmineralización del diente. Los edulcorantes intensos (como sacarina, ciclamato, acesulfamo-K y aspartamo) y los sustitutos del azúcar (como isomalt, sorbitol y xylitol) no pueden fermentarse por las bacterias de la boca y no la perjudican. De hecho, los chicles sin azúcar estimulan el flujo de saliva, contribuyen a la prevención de caries.
Tu dentista puede aconsejarte para mantener una mejor higiene en tu caso particular ya que los dientes apiñados, con restauraciones defectuosas, prótesis removibles con ganchos de apoyo, defectos en el esmalte, o con anatomía muy profunda dificultan la higiene favoreciendo las caries
Tu dentista puede pautar la aplicación de flúor y otras medidas de protección para fortalecer el esmalte.
